Se acerca el Día de la Madre y queremos celebrarlo en familia como es debido. Si no te ves cocinando un menú tú misma, o sencillamente no te apetece, ir a un restaurante puede ser la solución. Y Madrid y Barcelona esconden rincones que son verdaderas maravillas.
Para facilitarte la tarea de búsqueda, te proponemos once opciones que se nos antojan perfectas para disfrutar de un rato juntos. Comida rica y ambiente bonito y acogedor, lo tienen todo. Las hay para todos los gustos, desde el restaurante de moda para comer sushi en la capital, hasta el local con las hamburguesas americanas más cool de Barcelona, pasando por un jardín secreto al lado de Retiro. El regalo no es lo importante y menos si la sorprendes con una comida en uno de estos sitiazos:
Madrid
Zuma Madrid (Paseo de la Castellana, 2)
Este restaurante pertenece a un grupo varias veces galardonado con locales en Londres, Miami, Aby Dhabi, Las Vegas y Hong Kong, entre otros. El recientemente abierto espacio en Madrid ya se ha convertido en el place to be y es una maravilla de 800 metros cuadrados que utiliza azulejos de cerámica que fusionan la cultura japonesa con la española.
Su cocina surge del informal y conocido concepto japonés izakaya, reflejo de un estilo relajado para comer y beber. Incluye una cocina principal, un mostrador de sushi y una parrilla robata que ofrece cocina japonesa moderna y sofisticada. Una visión de la comida tradicional japonesa con una visión más contemporánea que incluye platos estrella como solomillo de ternera picante con sésamo, guindilla roja y soja dulce, bacalao negro marinado envuelto en hoja de hoba o langostino tigre jumbo con yuzu y pimienta…
Bangalore
Un viaje a la India donde disfrutar y degustar su auténtica comida. Con un espacio dividido en dos salones y terraza decorados con todo detalle al más puro estilo hindú, tiene una gran variedad de platos con diferentes salsas, colores y especias cocinados al estilo Tandoori con entrantes, principales - con curry de cordero, pollo y pescado - ideales para acompañar sus arroces basmati aromáticos. Y, para aquellos que quieran descubrir más, también disponen de menú degustación.
Platos estrella: Chicken Samosas y Peshwari Naan
Restaurante Ginkgo Garden (Calle Gil de Santivañes, 6)
Situado en el número 6 de la calle Gil de Santivañes, junto a la mítica calle Serrano y la emblemática Puerta de Alcalá, el restaurante Ginkgo Garden es un oasis en el centro de Madrid. Tiene un jardín exterior con una gran cristalera y decoración con colores vivos y detalles de decoración vegetal.
Su carta se renueva semanalmente, pues es el laboratorio creativo de Ginkgo Restaurantes y sus propuestas se pueden degustar y calificar cada una de ellas con la posibilidad de incluirlas permanentemente en la carta. Aúna la cocina española y la asiática, destacando algunas de sus tapas como las Gyozas de pollo con salsa de chile dulce o el Mollete de Anguila Ahumada con Foie. Entre sus platos principales destacan sus exquisitos Chipirones de anzuelo salteados al wok con verduritas, el Tataki de solomillo de vaca gallega en costra de sésamo o la Terrina de rabo de toro y foie con chips de verduras.
Incorpora carta de sushi y cócteles y una agenda de música en directo que ameniza todas las tardes de jueves a domingo con DJ Session House, Techno, Greatest Hits o British Invasion.
Restaurante La Lluna (Calle Recoletos, 13)
Un restaurante de cocina internacional en un ambiente inspirado en los años 20 neoyorkinos. Un espacio creado con mucho mimo con un único fin: es un espacio pensado para que disfrutes de la comida, la bebida y, sobre todo, de la compañía. Destaca su carpaccio de ternera wagyu, pesto, parmesano y helado de pistacho, el pulpo con alioli de lima y puré de patata trufado y el falso risotto puntalette de carrilladas, boletus y trigueros.
También tienen carta de cócteles.
Running Sushi in Akihabara (Calle Princesa 1-3)
Una experiencia inmersiva por uno de los barrios más populares de Tokio, epicentro de la cultura pop japonesa. Los clientes deben subirse al metro de Tokio para llegar a su mesa. Tras bajarse del vagón al aviso del megáfono se les indica que han llegado a su destino y se encuentran con el típico quiosco de prensa con auténticas revistas japonesas a modo de recepción donde se les da la bienvenida.
La comida se sirve mediante el sistema kaitenzsushi por donde circulan platos asiáticos por cintas giratorias.
Martinica (Calle Pinar, 6)
Este restaurante maravillará a todas las madres. Se presenta como un espacio de diseño y arquitectura en el que a través de la gastronomía y la mixología se puede viajar por todo el mundo.
Las creaciones de su chef Marcello Salaris tienen influencias de Japón, México, Marruecos y su Cerdeña natal, ligadas a la perfección con el producto nacional y logrando creaciones que destacan por su delicadeza. Desde fuera, su fachada invita a adentrarse en un universo de naturaleza.
En su carta destacan platos como la Berenjena a la parmesana fusión ítalo-japonesa; el Bacalao a la brasa servido con guiso de patata, setas, trufa, consomé de cebolla y tuétano; y en la parte dulce Cítricos, una falsa mandarina con yogur y compota de naranja, kumquat, espuma de Campari y naranja sanguina.
Restaurante Taiga Madrid (Calle Conde de Peñalver, 42)
Un restaurante diseñado por el estudio de arquitectura MRGO (Diseñadores del grupo LALALA, entre otros). Un espacio con amplia terraza con cerramiento completo y dos plantas que permite tener un ambiente más informal y de tapeo en la parte de abajo y una cena más tranquila, con música también, en la parte de arriba.
Su carta mediterránea está basada en producto de calidad que brinda sabor, alegría y disfrute. Destacan las palomitas de gambas en tempura, los buñuelos de queso Idiazabal y los dados de solomillo de vacuno mayor con pimientos de padrón.
La Mariterranea (Calle Alcalá, 90)
El restaurante con sabor mediterráneo que prepara unos de los mejores arroces de Madrid. Tras el éxito de su primer restaurante en la isla de Formentera, trae a la capital sus arroces y paellas con denominación de origen. Sus fundadores son valencianos y utilizan arroz de cultivo propio cocinado con un caldo con receta secreta, fruto de generaciones de expertos arroceros.
En su menú encontrarás tanto arroces tradicionales (recetas de nuestra “Yaya Pilar”) como las recetas vanguardistas y más atrevidas.
Barcelona
Durango Diner (Carrer d'Aribau, 18)
Una versión del popular restaurante norteamericano del desierto del norte de México donde las camareras van vestidas de rosa y sirven café negro. Un local abierto todos los días, de la mañana a la madrugada, donde se pueda comer y beber a todas horas que va más allá de la típica hamburguesería.
En su carta, todos los iconos estadounidenses: desayunos de huevos con bacon y frijoles, tacos de pato en el whisky de centeno, bocadillo de ostras fritas, un cremoso sándwich de bacon, lechuga y tomate, hot-dog de cocodrilo...
Apriori (Carrer de la Granada del Penedès, 19)
Con dos plantas decoradas con estilo años 60, este restaurante pretende transmitir la esencia de la cocina tradicional y de temporada. Las opciones van variando cada cierto tiempo y son sencillas y tradicionales. Destaca el carpaccio de cigala con huevas de trufa, tobiko y wasabi, el tataki de vaca vieja con salsa café de París y el calamar plancha relleno de sobrasada.
Gala Restaurante (Calle Provença, 286)
Terminamos con el local de moda de Barcelona que se ha hecho famoso por su tiovivo, su sala de baile escondida y su fuente con forma de nariz. Un local surrealista con cocina mediterránea donde empezar la jornada disfrutando de platos tradicionales catalanes de calidad y terminar realizando una sesión de tarot.
Entre los platos, se han hecho famosos sus macarrones de la nona, sus guisantes del Maresme con butifarra negra, sus guisos, su croqueta de fricandó y su tortilla abierta con alcachofas y trufa negra.
Fotos | Cedidas por los restaurantes
