Seguro que en más de una ocasión os habréis fijado en las curiosas campañas de la firma de moda American Apparel, una marca que se caracteriza por utilizar en sus campañas publicitarias cuerpos que se asemejan más a los que podemos ver en la vida real, en la calle, en los centros comerciales, en la playa...
Cuando entras en su página web, desde el princpio notas que las modelos no son como las de otras marcas, algo que llama la atención. Estamos tan acostumbrados a ver solo un tipo de cuerpo dentro del mundo de la moda que rápidamente cuando no vemos ese estereotipo se nos dispara la señal de alarma.
Ese es el caso de Megan Fay, una chica de 21 años que primero fue dependienta de la marca y ahora es uno de los rostros más representativos de la misma. Fay se caracteriza por ser una chica guapa, con un cuerpo ni demasiado delgado ni demasiado curvilíneo, se ve que no es un cuerpo definido a golpe de gimnasio ni cuidado con dietas obsesivas.
Megan es muy activa en las redes sociales, sobre todo en su cuenta de Instagram donde cuenta con 84,8k seguidores y ahí es donde ha conseguido cautivar a una gran cantidad de personas, la modelo utiliza su cuenta para echarle humor y reírse de la belleza demasiado perfecta y estirada.
Fay no duda en hacerse fotos de lo más variopintas, sacando barriga, mostrando su rostro sin maquillaje, con sueño o intentando sacar papada, una de sus fotos favoritas ya que hay muchas con este gesto.
Tampoco duda en dejar fotos con mensajes donde se puede ver que una sola pose puede hacer que nos veamos diferentes. Como el famoso "thigh gap" o lo que es lo mismo, el espacio que muchas buscan tener entre la cara interior de sus muslos.
O fotos graciosas en las que dice "No lleven un crop top y pantalones vaqueros ajustados a una hamburguesería".
Desde luego que Megan hace lo que la sale del moño, no está pendiente de salir perfecta en las fotos como la mayoría de las modelos, sino todo lo contrario, le sobra tiempo para dejar claro que no todo es lo que parece y que los cánones de belleza femeninos que nos quieren vender tampoco se los cree.
Su belleza considerada estándar hace que muchas chicas se vean identificadas, que se sientan más guapas, desterrando la idea de que una solo puede sentirse a gusto en su cuerpo si se acerca al de las modelos de Victoria's Secret. ¡Anda ya!
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