¿Es adecuado cambiar de marca de hidratante o de tratamiento cada cierto tiempo? Esta es una pregunta difícil de contestar y probablemente cada persona os dará una opinión distinta. Las marcas de cosmética intentan fidelizar a la clientela, y para ello pretenden que usemos todos los productos de su gama, y durante mucho tiempo.
Sin embargo ¿debemos fiarnos de las marcas de belleza en este sentido? Como siempre os decimos nadie mejor que vosotras para saber lo que le va bien a vuestra piel y si ésta os está pidiendo otra cosa, mejor o distinta. Yo soy de la opinión de que la piel siempre avisa y os dirá enseguida si la hidratante tiene demasiada grasa, o demasiada poca hidratación, o se queda corta.
En mi rutina suelo cambiar de producto cuando veo que no me funciona adecuadamente, esperando encontrar el producto perfecto. Poco a poco los voy encontrando y en algunos de los productos de mi rutina ya no cambio nunca (si seguís mis posts ya sabréis cuál es mi hidratante desde hace años).
La piel suele ser muy agradecida; si se la trata bien y se le da un producto adecuado lo dejará traslucir enseguida: mayor lozanía, luminosidad y poros más cerrados en mi caso. Si tenéis la piel seca la notaréis menos tirante y más hidratante, y probablemente sin pielecitas o escamas si antes os salían.
Por lo tanto ¿qué os podría aconsejar al respecto? Pues que os dejéis llevar por vuestra intuición y experiencia y que no tengáis miedo a probar cosas nuevas. Nunca se sabe cuándo podéis encontrar vuestro producto perfecto y así la piel puede descansar de un ingrediente determinado (por ejemplo del glicólico o el retinol, que son fuertes). Si véis que el cambio no da el resultado esperado siempre estáis a tiempo de volver a la rutina anterior.
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