Verano, calor, el inevitable sudor y una de las zonas que más sufre:las axilas. En esta época es necesario cuidarlas al máximo, no sólo por razones de salud e higiene, sino de estética. La axila además suele ser castigada periódicamente con las depilaciones -a la cera, con cuchilla o con crema-por lo que mantenerla exfoliada e hidratada es esencial.
Uno de los principales problemas son los pelitos enquistados que a veces aparecen. Para ello lo ideal es exfoliar la zona en la ducha diaria, bien con un guante de crin o bien con un exfoliante corporal. Si esto no da resultado hay productos específicos y en casos ya más graves tu profesional del centro de belleza podrá ayudarte a liberar el poro.
Los pequeños pelitos que aparecen al poco tiempo de la depilación, sobre todo si es a la cera, son un fastidio, para lo cual muchas chicas usan una depiladora eléctrica con cabezal específico. Sin embargo si usáis cuchilla o crema depilatoria os saldrán más uniformes y más a la vez pero es mejor que los dejéis crecer antes de intentar quitarlos de nuevo.
Los desodorantes sin duda también agreden la piel de la axila, sobre todo los antitranspirantes, que, como sabéis, no son demasiados buenos para la piel. En verano es mejor lavarse la axila más a menudo y utilizar un desodorante suave y que no impida la transpiración, de los que ahora hay muchos en el mercado.
Por último una buena hidratación será muy agradecida. Nada de cremas untuosas ni aceites corporales, sino simplemente una pasada de hidratante con los restos que os queden en la mano de aplicar el body milk por el resto del cuerpo y listo. Hay personas que prefieren polvos de talco o la típica Talkistina de toda la vida, pero como siempre, es cuestión de gustos.
Imagen | Lanuiop en Flickr
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