Instabreast: las nuevas (y peligrosas) inyecciones para aumentar el volumen del pecho

Instabreast: las nuevas (y peligrosas) inyecciones para aumentar el volumen del pecho

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Instabreast: las nuevas (y peligrosas) inyecciones para aumentar el volumen del pecho

Una de las cirugías estéticas más demandadas es el aumento de pecho. A pesar de los efectos secundarios que pueda llegar a tener cualquier procedimiento de este tipo, cada día millones de mujeres en todo el mundo se someten a ella. Sin embargo hace poco ha aparecido una nueva técnica llamada 'Instabreast', que en teoría ofrece los mismos resultados pero sin necesidad de intervención. ¿Lo malo?: que puede llegar a ser bastante peligrosa.

Según el cirujano plástico Moisés Martín Anaya desde Estados Unidos están llegando modas y tendencias de última hora, acompañadas de un falta absoluta de información y que, en manos de personas de escasa ética profesional, pueden suponer un problema de salud pública.

Es el caso del llamado Instabreast, creado por el doctor estadounidense Norman Rowe y popularizado con el nombre de “efecto cenicienta”, que consiste en la infiltración de suero fisiológico en las mamas. Dicha solución que se absorbe en un periodo de entre ocho y veinticuatro horas y como era de esperarse, ha creado alarma entre los profesionales de la Asociación Española de Cirugía Estética Plástica.

El miedo de algunos pacientes a pasar por el quirófano, así como los precios de la intervención han derivado el procedimiento hacia el campo de la medicina estética, en cuyos procedimientos no se precisa anesteris general ni requieren postoperatorio.

Desde la AECEP se advierte que “la punción en el pecho presenta riesgos de sangrado e infección”. Mientras, su director Jaime Antonio García Pérez avisa de que “someter a la mama a esos cambios de volumen bruscos y continuados provocará un deterioro del aspecto mamario en forma de caída y atrofia de una manera más acentuada de lo que produciría un embarazo”.

Mientras que el Instabreast está pendiente de aprobación por la Agencia Americana del Medicamento, el ácido hialurónico, ingrediente estrella de los cócteles de belleza ha sido prohibido por su homóloga española para su empleo como inyectable en el pecho, ya que su infiltración en la glándula mamaria puede desvirtuar los análisis de detección del cáncer de mama.

¿Existe algún otro procedimiento para aumentar el pecho y que no sea una cirugía?

Existen dos procedimientos alternativos a la cirugía, aunque no produce los mismos resultados: la infiltración de la grasa autóloga y el plasma rico en plaquetas.

En el primero de los casos se trata de grasa excedente de partes del cuerpo del propio paciente, que se infiltra en la zona. En un principio existieron dudas sobre si desvirtuaba los diagnósticos oncológicos. Descartado este asunto, su único problema es la reabsorción de la grasa, ya que, explica el doctor Anaya, depende de cada caso que haya que reinyectar pasado determinado número de meses. Claramente no es un procedimiento definitivo y tampoco la mejor elección para un aumento significativo de talla.

Por su parte, el plasma rico en plaquetas (una solución derivada de la centrifugación de la propia sangre del paciente y enriquecida con plaquetas), se puede emplear sólo para rellenar arrugas del escote y no para aumentar de pecho.

Imagen | Victoria's Secret

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