El yogur es sin duda uno de los postres más habituales de las comidas y las cenas. Son muchas las que apuestan por desayunos donde este es el protagonista, acompañado de frutas como fresas, plátano, frambuesas o arándanos, bowls donde vamos añadiendo toppings como granola o semillas de chía que ya se han convertido en una opción saludable para empezar las mañanas así como en la guinda del pastel a la hora de poner fin a las comidas.
De entre su variedad es esencial decantarse por las opciones naturales, siempre más saludables que otras con sabores o con trozos de fruta, dado que estas últimas, a pesar de parecer en principio una opción bastante óptima para la dieta, el hecho de contener frutas hace que dicho producto necesite más conservantes y aditivos. Está claro que fijarse en el etiquetado de estos alimentos es esencial para optar por las mejores alternativas, pero a pesar de apostar por productos de calidad, ¿es sano el consumo habitual de yogur para nuestro organismo?
El yogur es un clásico de nuestras dietas, un producto a base de leche fermentada que se obtiene gracias a las bacterias de las familias Lactobacillus bulgaricus y Streptococcus thermophilus y que destaca especialmente por ser un probiótico que contiene microorganismos vivos que favorecen a la microbiota intestinal, una parte esencial a la hora de llevar a cabo la digestión de alimentos, la síntesis de vitaminas y la absorción de nutrientes.
Beneficios del yogur en nuestra dieta diaria
- Según apuntan los estudios científicos, el yogur no solo es una gran fuente de calcio, sino que también aporta al organismo proteínas de alto valor, además de aminoácidos esenciales. A todo esto le sumamos que gracias a su papel como probiótico, mejora la salud gastrointestinal y fortalece el sistema.
- El yogur tiene un papel importante a la hora de fomentar una microbiota intestinal diversa, que según apuntan las investigaciones científicas está asociada con un menor riesgo de enfermedades como la obesidad, la diabetes tipo 2 así como trastornos inflamatorios crónicos.
- Sobre su consumo diario cabe destacar que aquellos que incluyen el yogur natural en sus dietas tienen una mayor ingesta de nutrientes que los que no, según apunta un estudio científico, donde también se afirma que dicho patrón alimenticio contribuye a una menor incidencia de problemas relacionados con el sobrepeso.
Está claro que nunca está de más incluir en tu cesta de la compra un par de yogures con los que disfrutar de un postre saludable con infinidad de propiedades de las que podrá beneficiarse tu cuerpo. Y es que la clave está en mirar la etiqueta del producto, fijarnos en el azúcar y los componentes añadidos para elegir las mejores opciones, el resto ya es solo disfrutar.
Fotos | Ron Lach en Pexels, Nicola Barts en Pexels
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